Los OVNIs y las figuras extrañas que parecerían visitantes espaciales a menudo se encuentran en pinturas rupestres en las paredes rupestres de todo el planeta, pero estas imágenes también aparecen en piezas de arte clásicas, especialmente aquellas que representan eventos divinos.
¿Qué habría llevado a estos artistas a retratar estos enigmáticos objetos voladores en un momento en que el pináculo de la tecnología, cuando se trataba de medios de transporte, se limitaba a los simples carruajes?
Annales Laurissenses
Las figuras anteriores aparecen en los «Annales Laurissenses», un manuscrito francés del siglo 12, en el que se detalla el asedio del Castillo de Sigiburg en el año 776, por los sajones.
En estos textos, se dice que cuando los invasores sajones habían rodeado la fortaleza, una flota de discos apareció en el cielo, sobrevolando la iglesia.
Los sajones entendieron el evento como una especie de «protección celestial» y decidieron retirarse de la batalla.
Anunciación con San Emigdio
Pintada por el italiano Carlo Crivelli en 1486, esta obra celebra la proclamación del Ángel Gabriel a la Virgen María, que daría vida a Jesús.
Para los expertos en pinturas, el objeto del que sale el Rayo de Luz o Espíritu Santo, hacia la cabeza de María, no es más que un grupo de ángeles girando en círculo alrededor de las nubes, pero para los defensores del fenómeno OVNI, representa un platillo volante y el contacto de la Virgen María con extraterrestres y, según esta interpretación, Jesús podría ser un extraterrestre.
El Bautismo de Cristo
Esta obra del pintor holandés Aert De Gelder fue realizada alrededor de 1710 y representa el bautismo de Jesús.
En el Nuevo Testamento, en Mateo 3:16, leemos, «Y Jesús, después que fue bautizado, subió luego del agua; y he aquí los cielos le fueron abiertos, y vio al Espíritu de Dios que descendía como paloma, y venía sobre él».
La pintura muestra lo que parecen ser columnas de luz que provienen del cielo e iluminan la escena, presumiblemente enviadas por Dios, pero se cree que el artista holandés, discípulo de Rembrandt, ha obtenido acceso a los archivos secretos de la Biblioteca Vaticana y que las pinturas de Gelder, especialmente esta, fueron formas que el pintor encontró de transmitir este conocimiento secreto al público.
La Crucifixión
Esta obra fue pintada en 1350 y se encuentra en el Monasterio Visoki Decani en Kosovo, Serbia.
Muestra la crucifixión de Jesús, pero se pueden notar dos extraños objetos voladores junto a Jesús, que llevan figuras humanas y serían, según los expertos tradicionales, representaciones del Sol (izquierda) y la Luna (derecha), como una forma de mostrar el ciclo de la vida, día y noche, de una manera humanizada.
Pero según los teóricos OVNI, se cree que estos objetos representan naves alienígenas con sus pilotos vestidos con trajes espaciales, y sería una forma útil de revelar al mundo el contacto de la humanidad con los extraterrestres y tal vez incluso la naturaleza extraterrestre del propio Jesús.
La Glorificación de la Eucaristía
Encargada por la Iglesia de San Pietro de Montalcino, esta pintura fue realizada por el italiano Ventura Salimbeni en 1595 y se cree que sugiere la posibilidad de vida extraterrestre o viajes en el tiempo.
El objeto de la polémica es uno que se encuentra entre Jesús y Dios, y que tiene un formato muy similar al del satélite ruso Sputnik, que dio inicio a la carrera espacial en 1957, lo que llevó a muchos a sugerir que el artista podía predecir el futuro o haber viajado en el tiempo.
Otra teoría sugiere que el objeto podría ser algún tipo de dispositivo de monitoreo de la tierra por extraterrestres.
Los historiadores tradicionales dicen que el objeto es sólo el «Globo de la Creación», pero, extrañamente, parece tener un acabado metálico y no contiene evidencia de tierra o continentes, lo que sugiere que sería algo artificial y no divino.
Libro de los Buenos Modales
Algunas de las virtudes cristianas como la castidad, la precaución, la mansedura, la justicia, la moderación, la obediencia, la diligencia y la humildad se representan en «Libro de los Buenos Modales», escrito por el francés Jacques Legrand en 1338.
El libro se exhibe en el Museo Condé, ubicado en el histórico castillo de Chantilly en Francia y claramente la misteriosa esfera en el centro de la escena rodeada de otros extraños objetos voladores, es lo que despierta la polémica nunca explicada.
Madonna Col Bambino e San Giovannino
Hay un debate sobre quién es el autor de la obra llamada «Madonna Col Bambino e San Giovannino».
La pintura del siglo 15 se atribuye comúnmente a Domenico Ghirlandaio, aunque algunos historiadores del arte consideran a Arcangelo di Jacopo del Sellaio y otros Bastiano Mainardi como su creador.
La pintura renacentista, exhibida en el Palazzo Vecchio en Florencia, Italia, representa a María, madre de Jesús, mirando a los dos niños, pero en el fondo, se puede ver una imagen clara de lo que parece ser un OVNI volador, mientras que un hombre bloquea el sol con su mano y se enfrenta al extraño objeto volador en el cielo, demostrando que dicho objeto podría no ser nada inusual en ese momento.
El Milagro de la Nieve
El panel del pintor renacentista italiano Masolino da Panicale, hecho en el siglo 15, representa un evento que se conoció como «El Milagro de la Nieve», una nevada fuera de temporada, que ocurrió en Roma durante el siglo 4, en un día de verano.
La imagen muestra a la población tratando de entender lo que está sucediendo, mientras Jesús y María observan a todos de lo que sería una gran nube, rodeados por docenas de otras pequeñas nubes.
Los ufólogos creen que no son nubes, sino más bien una flota de naves extraterrestres y argumentan que los objetos serían parte de la historia original y serían responsables de la nieve fuera de temporada.
Los cambios repentinos de temperatura están asociados con avistamientos de OVNIs y hay un registro del 27 de octubre de 1954, cuando numerosos objetos en forma de disco fueron avistados sobrevolando la ciudad de Florencia, Italia, a media tarde y su paso fue seguido por la caída de copos de nieve.
Prajnaparamita Sutra
La imagen pertenece al texto «Prajnaparamita Sutra» (Los Sutras de la Perfección de la Sabiduría), traducido en el siglo 10 del sánscrito al tibetano, y que se exhibe en un museo en Japón.
Escrito originalmente en la India alrededor del año 100 a.C., el texto se refiere a la forma perfeccionada de ver la naturaleza de la realidad, y una de sus características más importantes es la «nutpada», un concepto budista para la ausencia de origen.
Los dibujos contenidos en el libro representan las Vimanas, una especie de nave circular o cilíndrica de dos pisos con miradores y una cúpula. El texto afirma que el objeto voló con «la velocidad del viento» y dio lugar a un «sonido melodioso».
Prodigiorum Liber
El italiano Julius Obsequens fue un escritor de la Antigua Roma, que vivió en el siglo 4 e hizo una compilación llamada «Prodigiorum Liber» (El Libro de las Maravillas), basada en el trabajo de Tito Livio, un historiador romano, que contiene varios textos que se refieren a eventos extraordinarios y sobrenaturales que ocurrieron en el antiguo Imperio Romano entre 249 a.C. y 12 a.C.
La ilustración pertenece a un avistamiento OVNI y el texto dice: «Algo así como algún tipo de arma, reluciente y dorada, se levantó del suelo con gran ruido y disparó hacia el cielo».
El Relicario del Vaticano
En la misteriosa y secreta Biblioteca Vaticana, hay un relicario que contiene piedras de Palestina de los siglos 6 y 7.
Lo que llama la atención es que una de las varias imágenes que adornan el relicario muestra una representación de María en la tumba de Jesús y detrás, aparece un extraño objeto con una cúpula de la que emana un haz de luz.
La Tierra de Gung Ji
Esta es una antigua ilustración china de un libro titulado «La Tierra de Gung Ji: Estudio Ilustrado de Países Extranjeros».
Fue escrito alrededor de 1400 y contiene pasajes crípticos como este: «La gente podía soplar los carros que viajaban lejos con el viento adecuado. En los días de Tarng (1700 a.C.), la gente de Gung Ji voló en un coche que se dirigía hacia el oeste en Yew Jo. Tarng había desmantelado su coche para que no se lo mostrara a la gente. Luego vino un viento del este en el que solía volar su coche hacia su propio país (5.000 km) al este de nuestras tierras».
El Triunfo del Verano
Este tapiz fue realizado en 1538 en Brujas, Bélgica, y actualmente se exhibe en el Museo Nacional de Baviera en Alemania.
La pieza parece representar el ascenso de un gobernante al poder y muestra varios objetos en las esquinas superiores del tapiz, con forma de platillos que parecen tener cúpulas, muy similares a los informes de los OVNIs modernos.
Dado que no se conocen símbolos religiosos que sean similares a este, se supone que estos objetos no simbolizan algo divino, y es posible que el artista estuviera recreando un fenómeno que él mismo ha observado.
Ume No Chiri
Escrito en 1844, «Ume No Chiri» es uno de los tres textos japoneses que informan del desembarco de un misterioso objeto, que fue encontrado a la deriva frente a la costa de la provincia de Hitachi en el este de Japón en 1803. Los otros dos textos son el «Shosetsu» de 1825 y el «Hyoryu Kishu» de 1835.
La ilustración representa las características del objeto que los marineros japoneses encontraron flotando en el océano.
Desde el interior de la «embarcación hueca», como se le llamaba, salió una mujer, que no hablaba japonés, luego regresó a su barco y desapareció en el mar, sin ser vista nunca más.
Para los folcloristas japoneses, «Ume No Chiri» es solo una de varias leyendas sobre seres sobrenaturales que impregnan la cultura japonesa, pero para los ufólogos es evidencia de contacto extraterrestre.
Vida de la Virgen
En la Basílica de Beaune Notre Dame en Borgoña, Francia, construida en el siglo 12, hay un tapiz increíble, que data del siglo 15, en el que se puede disfrutar de varios eventos en la vida de la Virgen María.
El detalle está en una de las imágenes, en el lado izquierdo de la esquina superior, en la que se nota un objeto extraño, que se asemeja a un OVNI, sobrevolando la ciudad, justo encima de la figura de tres mujeres de la época.
