El incidente brasileño que se conoció mundialmente como la «Noche Oficial OVNI» ocurrió la noche del 19 de mayo de 1986, cuando alrededor de 20 objetos voladores no identificados fueron detectados por pilotos y controladores de vuelo.
El evento duró aproximadamente 3 horas y los ovnis fueron observados por pilotos y torres en 4 estados, Goiás, São Paulo, Río de Janeiro y Paraná.
COMDABRA, el Comando de Defensa Aeroespacial de Brasil, consideró que la seguridad de los vuelos estaba amenazada y por eso se llamó a la Fuerza Aérea Brasileña para perseguir e interceptar los OVNIs.
Al día siguiente, el entonces ministro de Aeronáutica, teniente brigadier Octávio Júlio Moreira Lima, dio una conferencia de prensa, junto a los pilotos de combate, confirmando los hechos y en 2009 la Fuerza Aérea Brasileña (FAB) declaró la gravedad y veracidad de lo sucedido.
Durante la conferencia de prensa, Moreira Lima también prometió un informe en aproximadamente un mes y transparencia durante las investigaciones sobre el incidente. La promesa, lamentablemente, no se cumplió y el informe concluido el 2 de junio de 1986 no se hizo público hasta 2013, gracias a la Ley de Acceso a la Información.
Según el informe, la Fuerza Aérea Brasileña confirma la existencia de OVNIs operados por seres inteligentes.
«Como conclusión de los constantes hechos observados, en casi todas las presentaciones, este Comando considera que los fenómenos son sólidos y reflejan en cierta forma inteligencia, debido a la capacidad de seguir y mantener distancia de los observadores, así como de volar en formación, no necesariamente tripulada».
Pero las grabaciones difundidas recientemente por la FAB eran, hasta ahora, la mejor evidencia de lo sucedido, donde se puede escuchar con plenitud y riqueza de detalles el diálogo natural entre pilotos y operadores.
En el audio original de la torre de control de São José dos Campos, podemos escuchar el diálogo entre el piloto y la torre:
«Ahora brilla intensamente. No hay luz de navegación, es sólo un punto brillante, ha estado atrapado en la misma posición desde que comencé a verlo. Parece una estrella, pero lo he comprobado y no lo es», dice el piloto.
En otra parte de la grabación se escucha lo siguiente: «¡Se aleja, se hace más pequeño, se fue! Brasilia, ¿hay algo? ¡El objeto se fue! Ahora regresa, regresa, ha aumentado su brillo. No puedo estar viendo cosas. Es una locura aquí».
Ni que decir tiene que este conjunto de cualidades presenciadas por los pilotos no existe en ningún avión con tecnología terrestre.
