Según los científicos, una fina capa de roca de 3.300 millones de años contiene un tesoro inesperado: material orgánico que fue transportado a la Tierra por meteoritos cuando el planeta aún era joven y quedó enterrado debido a la actividad volcánica pasada.
«Esta es la primera vez que encontramos evidencia real de carbono extraterrestre en rocas terrestres», explicó la astrobióloga Frances Westall, que participó en la investigación.
Hasta ahora, sabemos que las moléculas orgánicas, desde el metano hasta los aminoácidos, existen en el espacio, y es posible que estas moléculas hayan llegado a nuestro planeta a través de asteroides. Los científicos que estudian estas rocas en Sudáfrica parecen haber descubierto evidencia de los ejemplos más antiguos de estas moléculas extraterrestres.
Las montañas Makhonjwa se encuentran en el este de Sudáfrica y Suazilandia y contienen depósitos de rocas volcánicas de 7 a 20 metros de espesor de 3.300 millones de años llamados Josefdal Chert. Entre las capas de ceniza volcánica hay capas de carbono, depositadas durante períodos de baja actividad volcánica, y toda la región parece haber sido alterada por la presencia de agua.
Los investigadores analizaron muestras recogidas durante las campañas de campo, las dividieron en decenas de trozos y las analizaron con microscopios electrónicos, protones de un acelerador de partículas y resonancia paramagnética electrónica de onda continua (cw-EPR). En esencia, los investigadores midieron cómo respondían los electrones de las muestras a un campo magnético que cambiaba lentamente.
Utilizando la técnica de espectroscopia de resonancia paramagnética electrónica (EPR), los investigadores descubrieron que la roca tenía dos tipos de materia orgánica insoluble, ambos sugiriendo orígenes no terrestres, los más antiguos identificados hasta ahora.
Las señales emitidas por el equipo se parecen a algo que los científicos han notado antes: muestras de meteoritos antiguos que contienen compuestos orgánicos.
Los investigadores no se sorprendieron al encontrar material extraterrestre en sus sedimentos; probablemente meteoritos cayeron sobre la Tierra antigua, transportando moléculas de carbono orgánico.
Lo que les sorprendió es que de alguna manera había suficientes materiales presentes en el área como para seguir siendo detectables 3.300 millones de años después.
Propusieron que tal vez la capa que analizaron podría haberse formado después del impacto de un meteorito que produjo una capa de polvo en la atmósfera que se depositó debajo de una capa de ceniza volcánica.
El descubrimiento respalda la idea de que sustancias químicas orgánicas basadas en carbono procedentes del espacio proporcionaron algunas de las materias primas para la primera vida en la Tierra.
Sin embargo, esto podría complicar la búsqueda de vida en otros planetas, ya que encontrar capas de carbono orgánico extraterrestre de asteroides obstaculizaría los esfuerzos para detectar biofirmas de aspecto similar en otros planetas, como Marte, ya que la firma de un asteroide depositado podría coincidir. la firma de la vida.
Las investigaciones continúan demostrando que las rocas de nuestro planeta conservan una historia increíble, y no sólo la nuestra, sino la historia de todo el Sistema Solar.