Caso Amicizia: Extraterrestres en Italia

Os alienígenas chamados de "W56" teriam estreitas relações amistosas com alguns seres humanos.

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Decenas de personas en Italia han sido contactadas por extraterrestres con apariencia humana. Es importante reconocer que estos contactados eran miembros destacados de la sociedad italiana como escritores, políticos, empresarios, artistas y profesores.

La historia de estos contactos masivos comenzó en 1956, cuando Bruno Sammaciccia y dos de sus amigos se encontraron con dos misteriosos individuos que, según dijeron, eran extraterrestres. Uno medía más de 2,40 metros de altura, mientras que el otro sólo medía 90 cm.

Sammaciccia y sus amigos, inicialmente sospechosos, finalmente fueron llevados a una enorme base subterránea, donde vieron más presuntos extraterrestres.

 

También vieron cómo se instruía a los niños en algunas de las tecnologías avanzadas que utilizaban, así como en sus naves espaciales.

Finalmente convencidos de que realmente estaban teniendo contacto con extraterrestres, Sammaciccia y sus amigos comenzaron a ayudar a los extraterrestres enviándoles productos como frutas, alimentos y otros materiales que eran transportados en camiones a sus bases.

Sammaciccia dice que varias personas estuvieron involucradas en el caso y algunas tuvieron reuniones con los extraterrestres.

Los individuos involucrados aumentaron en número con el tiempo y Sammaciccia ayudó a los extraterrestres a preparar a la humanidad para la realidad de la existencia de otras razas extraterrestres en otros planetas.

Muchos de los extraterrestres podrían integrarse fácilmente en la sociedad humana e incluso realizar trabajos regulares cuando sea necesario.

«El amor y el respeto es la forma en que los humanos deben vivir», fue la esencia del mensaje transmitido por estos extraterrestres durante sus frecuentes paseos por la playa de Pescara.

Estos seres, que pasaron a ser conocidos como «W56», explicaron que tenían una gran cantidad de bases en la Tierra y que la mayoría de ellas estaban bajo tierra, como la de Ascoli Piceno en Italia, o bajo el agua, como la del mar Adriático.

Según los informes, los W56 no están aquí para estudiarnos, sino para ayudarnos. Serían nuestros «hermanos mayores», ya que son esencialmente humanos y no son los únicos extraterrestres en la Tierra.

Entre nosotros estarían seres de varios otros planetas, porque la Tierra es un planeta peculiar en esta parte del Universo.

Sammaciccia informó sobre un conflicto entre extraterrestres que intentan influir en el desarrollo y el futuro de la humanidad.

Mientras los W56 promueven la unidad cósmica y el desarrollo de la ética, otros promueven el desarrollo tecnológico a toda costa.

Los W56 tendrían una profunda conexión con lo que llaman el ‘Alma del Universo’, algo más allá del nivel físico, y no están contentos con el alto nivel de violencia en la Tierra ni con la tendencia bélica de nuestra ciencia y tecnología.

Según Sammaciccia, los W56 tienen un cierto tipo de control general sobre todo lo que ocurre, pero su función es servir de guía moral y no se les permite intervenir en los acontecimientos de la humanidad, excepto bajo condiciones extremas específicas.